En las bodas de tarde-noche es cuando tenemos la posibilidad de lucir nuestras mejores galas. Es en este tipo de eventos donde podremos escoger estilismos casi sacados de alfombra roja para dejar boquiabiertos a cualquier invitado.
El protocolo dicta que el vestido debe de tener un largo hasta los pies (con o sin cola), se aprueban los paillettes, las grandes joyas y los peinados más trabajados para completar un look impecable.
Sin embargo, aunque la etiqueta permita este tipo de exuberancias, tendremos que tener mucho cuidado para que estas «licencias» no se vuelvan en nuestra contra. Votamos para este tipo de estilismos «el menos es más« o «la elegancia de la sencillez».
Para tener éxito, recuerda que tu outfit tiene que reflejar tu estilo personal, no vale disfrazarse.
Si quieres salirte del guión, opta por un look alejado de lo tradicional y acertarás con un vestido de invitada fresco y con estilo, aquí lo encontrarás.